domingo, 14 de febrero de 2016

EL MAR SIN MIEDO y el gol de Ghiggia


Eduardo de León

El querido compañero maestro Abilio Sanguinetti comentando el artículo de Paco Martínez “Rescate y Renovación”, referente fundamental de nuestra Lista 3 y de la Corriente Socialista Renovadora, observa que él prefiere Rescate a Renovación y señala también la omisión de nombres como Laguarda en el listado.
Para Paco no es necesario nombrar lo evidente.

Fue Manuel Laguarda, en efecto, quien en el Congreso socialista de 1987 redactó la Tesis de la Renovación Socialista como proceso y metodología permanente y como alianza entre socialismo y democracia aprobada entonces.

También en aquel Congreso se aprobó como Tesis una versión resumida de un documento del suscrito - redactado en la clandestinidad en 1981 y aprobado luego en un Pleno clandestino de la JSU - sobre la "Autocrítica de la Crisis de Identidad Socialista" referida al período abierto por el desastroso fracaso electoral de 1961 y la dictadura militar. La crisis de 1961, en efecto, explotó porque el PS perdió toda su bancada de 1 senador y 4 diputados creada pacientemente durante la década precedente y eligió a un diputado herrerista mientras su electorado huía hacia la novel Lista 99 de Zelmar dentro del Partido Colorado.
La autocrítica aprobada por el Congreso de 1987 proponía una explicación de porqué se quebró la identidad socialista detrás del seguidismo tupamaro y foquista, del seguidismo comunista y del seguidismo peruanista (todos expresados en escisiones de fracciones diferentes y en una clamorosa derrota popular ante las Fuerzas Armadas corporativas golpistas arietes de las clases dominantes y el imperialismo).

Pero sin interpretar a Paco (para quienes no le conocen Paco fue quien sucedió al entrañable "Tito", alias de Bernardo Kreimerman en la SG de la JSU clandestina de la que fue SG desde 1981 hasta 1989, dirección que tuve el orgullo de integrar a partir de 1982 hasta el 21 Congreso de 1985) yo creo que él sabe que todos nosotros estamos vivos y que el fondo de la renovación socialista no es una cuestión de escolástica ni de competencia de citas con autoridad bíblica.


Si Carlos Marx, Antonio Gramsci, Rosa Luxemburgo, Emilio Frugoni crearon algo nuevo no fue sólo porque rescataron sino porque renovaron.

Toda la lista del Paco, injusta como toda lista, accidental como toda lista, precisamente rescata a gente que en diferentes planos de la vida supieron arriesgarse y crear algo nuevo, proponer miradas nuevas, practicar novedades, inventar prácticas sociales o experimentos teóricos novedosos.
Lo que nosotros rescatamos en todos ellos son, al final, sus propias contribuciones renovadoras no su apego a las certezas y seguridades preexistentes.
Significa esto que una identidad no es, también y al mismo tiempo, continuidad?

Por supuesto. Y este es el mensaje de Paco: la renovación es rescate. Pero ¿cuál es el verdadero contenido del rescate? 
La renovación, nuestra capacidad de reinventar, reinventar el socialismo, reinventar el Frente Amplio.
Es decir, la esencia del socialismo es una tautología, un círculo dispuesto en espiral que siempre crece entre rescate y renovación.
¿Cuál es al fin la magia de la hazaña de Maracaná y del gol de Ghiggia millones de veces visto y repetido?
No el gol en sí, evidentemente, ni menos su imposible repetición como añoran todos los conservadores de todos los tiempos y esconde el lado mítico del Mito de Maracaná.
No. El secreto de la hazaña reside en su invitación a convertirnos nosotros en autores de nuestras propias hazañas.
Esa es la subversión del Mito, no su eterna repetición.

Y el hilo invisible de la continuidad socialista son ciertos valores y ciertos ejemplos entre los cuales la disposición de arriesgar y hacer política desde la identidad socialista (y no desde nuestro seguidismo culposo de otros modelos político culturales) o el rechazo del maniqueísmo (Buenos contra Malos) precristiano y anti marxista son valores permanentes.
Entre el rescate y la renovación hay una mediación: se llama acumulación, capacidad de acumular y producir nuevas síntesis.
El desafío es incluir lo nuevo adentro de la síntesis.
Eludir el consenso anodino, siempre tentador.

El desafío es aprender a cambiar no con mensajes de iluminados en algún Púlpito, sino escuchando los mensajes de la base, de la disconformidad con una política distante, las señales del gobierno, las señales de la sociedad civil, la unión de la teoría con la práctica en la praxis.
Porque esa unión es el alma del socialismo desde Marx, no la mercantilización total de nuestra propia política como intercambio de cargos por votos carente de ideas y sentidos-
Y aportar una contribución sincera y frontal, que no rehuya la confrontación de las ideas, a un cambio fraternal, unitario, constructivo, sobre todo leal, y, porqué no, cargado de energía.
Nosotros vamos junto a Mónica con esta confianza y esta lealtad, y vamos con este impulso de renovación y de cambio del partido con una lista 3 nacional, joven, del interior, de militancia territorial y social.

Aquí abajo en Youtube podemos ver el final de la historia brasileña de un hincha que logra construir una máquina del tiempo para tratar de prevenir al arquero brasileño del riesgo del gol de Ghiggia aunque con su intervención en lo que fue solo consigue confirmarlo.
La metáfora evidente es que no podemos reparar lo que ya no hicimos. 
Pero mientras estamos vivos y si estamos vivos es porque, como escribió Hannah Arendt, nuestra estadía en la tierra no se debe a que hayamos nacido para morir sino a que podemos volver a nacer o renacer, porque somos seres de recomienzos y porque nuestra esencia es nuestra capacidad de reinvención.
Una historia grandiosa y generosa de un socialismo y un sueño emancipatorio de 100 años es un mandato para recomenzar siempre porque el socialismo está cada vez más vivo.

Como dice un rap genial de un músico genial ante la sociedad dolida de los jóvenes que luchan solos pero unidos y valientes contra el mundo de la condena marginal y el abandono, de la pasta base y la lucha de las bandas delictivas o la soledad o la cana:


Se que debo hacer todo lo que debo para dibujar con fuego el cielo

Sé que debo hacer todo lo que debo para sobrevolar el mar sin miedo.

El mar sin miedo, la renovación y el rescate.




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